viernes, 16 de septiembre de 2016

NO CORTICOIDES


 Cuándo debemos preocuparnos por el ojo rojo

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¿Te has despertado con los ojos rojos? ¿Llevas en este estado varios días? Si es así, quizás necesites consultar a un médico, ya que el ojo rojo puede ser señal de algún otro problema más complejo que la simple irritación de la vista. Por ello, te daremos algunas pautas para señalar cuándo debes ir al médico por el ojo rojo.

Veremos que las causas del ojo rojo pueden ser varias. Algunas de ellas simplemente por una reacción alérgica muy común durante los cambios de estación, producto de alergias estacionales. Sin embargo, puede que ser indicio de infecciones más severas o, en casos extremos, primeros síntomas de una afección de la vista que puede traer daños permanente si no es tratada en tiempo y forma.
El cambio básico que se produce en el enrojecimiento del ojo se debe a que los vasos sanguíneos de la membrana conjuntiva (superficie del ojo) se irritan. Este cambio, efecto de diversos agentes externos o como señal de patologías y afecciones, provoca desde un tono rosado del globo ocular hasta un enrojecimiento tal que nos asustamos al ver nuestros ojos inyectados en sangre, algo que frecuentemente es infravalorado como síntoma.



Sin embargo, el enrojecimiento de la vista no debe ser señal de alarma, ya que en la mayor parte de los casos responde a causas naturales, o bien es producto de hechos cotidianos que influyen en el estado natural de nuestros ojos. Por ejemplo, el ojo rojo puede ser producto de la presencia de humo o partículas de polvo en el aire que el viento proyecta y provoca que pronto tengamos los ojos irritados. Es claro que sustancias como el polen o los pelos de nuestras mascotas puedan provocar reacciones alérgicas, con la impetuosa necesidad de rascarnos, lo que desencadena una obvia irritación ocular.

Hay otras causas muy simples, dentro de las que se incluye el uso de champú o productos cosméticos que pueden producir el enrojecimiento de la vista, así como el uso prolongado de lentes de contacto. Tampoco debe descartarse que tengas algún pequeño objeto incrustado en el ojo como causa del enrojecimiento.
En otras circunstancias, los ojos rojos pueden deberse a inflamaciones producidas por la presencia de virus y bacterias que afectan partes superficiales o externas del ojo y, en menor proporción, las estructuras internas de la vista. Dentro de las más comunes, podemos encontrarnos con la conjuntivitis, que se distingue por la presencia de líneas rosadas o rojas en la parte blanca de los ojos, con la posible aparición de secreciones. También es común la blefaritis, una inflamación de los folículos de donde nacen las pestañas.



Entre las segundas y menos comunes, están la úlcera de córnea y la iritis. La primera es producto de una infección bacteriana o viral. La segunda puede producirse por un proceso autoinmune, entre otras posibles causas.
En la mayoría de los casos, el médico podrá recetar algunas gotas para los ojos, entre otros posibles tratamientos para estas infecciones oculares. En caso de conjuntivitis, también existen algunos remedios caseros para tratar esta infección.

Un enrojecimiento prolongado y que no sea producto de las causas antes mencionadas, puede ser fruto de problemas más serios, sobre todo si viene acompañado de otras señales. Una de las causas puede ser fruto del glaucoma, por lo cual si tienes diabetes o altos niveles de glucosa, debes prestar gran atención a esta señal y otros cambios en la visión. Tampoco debe descartarse alguna posible lesión de retina a la que debes prestar atención inmediata.



En realidad, si tienes el ojo rojo por más de 2 días, debes visitar al médico para que te examine y encuentre la causa del enrojecimiento e indique el tratamiento a seguir. Asimismo, ante cualquier cambio en cómo ves las cosas o la presencia de dolor en la vista, manchas borrosas u otras formas de visión distorsionada, debes ir al doctor cuanto antes.
Por lo general, no hay motivos para alarmarse, ya que, en la mayoría de los casos, el ojo rojo puede ser fruto de una simple irritación. Por ello, siempre es bueno tener en cuenta algunos consejos para el cuidado de los ojos y cómo proteger tu vista.

La congestión ocular puede ocasionarse por muchos motivos, y suele ser uno de los cólicos más incómodos y molestos de solventar. Comúnmente, puede originarse por reacciones alérgicas a diferentes componentes del aire, un exceso de sol, o simplemente una excesiva manipulación del ojo con las manos.
Hoy te enseñaremos a tratar los molestos ojos rojos con algunos remedios caseros que pueden realizarse simplemente con unos pocos ingredientes que de seguro todos tenemos en casa. Tan solo necesitas un poco de tiempo para realizar las preparaciones correctas, y prestar atención a algunas recomendaciones fundamentales que también te ayudarán a eliminar la irritación ocular muy rápidamente.

¿Por qué se produce la congestión ocular?

Debemos encontrar primero la causa de nuestro padecimiento para después poder solucionarlo ¿verdad? Y como en este caso, los motivos generadores del cólico pueden ser muchos, primeramente es mejor determinar cuál es el factor que determina la congestión ocular en nuestros ojos para después poder tratarla.


·         Infección ocular. La infección es uno de los motivos más comunes de todos. Genera grandes ojos irritados, además de que si no se trata el problema con la suficiente anterioridad éste puede transformarse en conjuntivitis. Se trata por supuesto de un cólico de muy fácil transmisión, sin mencionar que la enfermedad puede derivar a la adquisición de otros agentes externos que pueden producirnos reacciones alérgicas al ambiente.

Lo más recomendable es cuidar los ojos de los agentes invasores de la naturaleza, principalmente de las pelusas de los árboles, el polen de las flores, y las partículas de polvo que se hallan dispersas en el aire.

·         Falta de sueño. Claramente la falta de sueño puede ocasionar una congestión ocular muy notoria, sin mencionar importantes ojeras y bolsas por debajo de tus ojos. Es recomendable respetar las horas de sueño que el cuerpo debe tener, no solo para proporcionar un mejor funcionamiento del organismo, sino también, para no sufrir efectos secundarios como la disminución de las defensas, la aparición de herpes en los labios, y los ojos rojos que tanto queremos evitar.

·         Uso excesivo de lentillas. ¡Cuidado con las lentillas! Últimamente están muy de moda las lentillas de colores para simular ojos claros, pero siempre es necesario tener en cuenta que se requieren lentillas de muy buena calidad para no maltratar toda la estructura externa de nuestros ojos, además de que es muy importante no excederse en el uso de éstos complementos estéticos, ya que pueden contribuir a la aparición de una importante congestión ocular.



En el caso que las lentillas sean por un uso estrictamente medicinal, es también recomendable no excederse en la cantidad de horas que éstas se utilicen, y sobre todas las cosas, nunca olvides quitártelas antes de dormir.

·         Ojos secos. Muchas personas disponen una sequedad particular en los ojos. ¿Porqué? Los motivos también pueden ser varios, pero básicamente la mayoría son con fundamentos médicos. Lo mejor es humectar el ojo con un humidificador determinado, y consultar a un oftalmólogo para comenzar algún tratamiento.

·         Uso excesivo del ordenador. Lamentablemente el uso excesivo del ordenador también puede ser un factor importante a considerar. Las largas horas enfrente a un monitor pueden hacer esforzar nuestra vista en determinados puntos fijos, causando cansancio, y un evidente enrojecimiento.

·         Alergias. Por último, las alergias también son un factor importante si lo que tratamos de encontrar son las principales causas de los “ojos rojos”. Éstas pueden ser muchas, y pueden presentar diferentes síntomas, aunque básicamente nadie se salva de una importante picazón, una irritación del lagrimal, en algunas ocasiones hinchazón del párpado, y el clásico lagrimeo.

Descansa bien tus ojos. Si no pudiste disfrutar de las horas necesarias de sueño, y lamentablemente te encuentras cansado, lo mejor es relajar los ojos, recostarte y colocar una compresa fría al menos por unos pocos minutos. Luego, vuelve a repetir el procedimiento, pero en este caso, utilizando una compresa de agua tibia. También puedes usar un paño húmedo para realizar esta tarea.



Utiliza bolsitas de te. Muchas personas realizan una buena porción de té, lo dejan enfriar, y colocan un paño sobre todo el contenido para que absorba bien el líquido. La mejor opción es utilizar un pedazo pequeño de algodón y utilizarlo como gotero. De esta forma, coloca pequeñas gotitas en tus ojos, o si así lo prefieres, utiliza directamente un pequeño sobrecito de té para hacer aún más fácil la receta.

Rodajas pequeñas de zanahoria. Ya te había mencionado anteriormente todos los beneficios que la zanahoria puede otorgarle a nuestro organismo. Hoy sin embargo, le hemos atribuido otra ventaja más en su utilización como medicina alternativa; la descongestión ocular.

Tan solo tienes que hervir la verdura, dejarla enfriar y colocarla bien helada sobre el párpado. Ésta receta servirá como descongestivo, desinflamante, y te ayudará a eliminar todos los síntomas de incomodidad de una manera muy rápida.

En caso de que el enrojecimiento no disminuya de ninguna forma. Existen determinadas gotitas hechas especialmente con ingredientes naturales que prometen un efecto mucho más rápido y efectivo. Tan solo deberías consultar con un especialista para saber cuales son las más indicadas para utilizar sin acudir a las lágrimas artificiales.



Haz poco caso de los colirios con corticoides, habitualmente prescritos por las farmacias. Y acude a tu oftalmólogo si ves que en 3-4 días no cede el problema.

OFTALMÓLOGO ESTEPONA




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