Existen múltiples causas de accidentes oculares, mismas que pueden ocurrir en lugares tanto
cerrados como abiertos. Es necesario identificar siempre la causa y las consecuencias tanto para la visión, como para la preservación del globo ocular
e, incluso, las que pueden poner
en peligro la vida del sujeto.
Los accidentes pueden ir desde los
más simples, como instilarse
accidentalmente gotas que no sean
para los ojos, hasta los más graves como aquellos
provocados en una riña por arma de fuego,
arma punzo-cortante o un accidente automovilístico, este último, bastante común.
Las causas son tantas y tan
variables que sería imposible enumerarlas todas.
Por eso es tan importante la atención
oportuna por el médico general,
para tomar las medidas urgentes
mientras se localiza al especialista. Desgraciadamente el uso de colirios con
corticoides esta a la orden del día, incluso por las farmacias, con lo que con
frecuencia nos complican una buena evolución.
Una historia clínica cuidadosa,
tomando en cuenta los signos y
síntomas, puede orientar a conocer
la severidad y la prontitud con la que se debe
actuar. La visión de moscas flotantes, el dolor
de cabeza, la visión de luces de colores, el dolor
orbitario u ocular, el aspecto asimétrico de
la cara, la coloración, el hundimiento del ojo o su apariencia saliente, la
visión doble y las alteraciones
de la pupila, pueden ser signos de
alarma que hay que tomar en cuenta de inmediato. Si las alteraciones progresan
rápidamente (horas o minutos) es un signo de peligro que hay que atender inmediatamente.
La asimetría en los hallazgos
oculares es de mucha ayuda para
determinar la estructura del ojo
dañada así como la gravedad del problema. Se
empieza con el estudio de la agudeza visual central
y de colores, y se prosigue con la visión periférica, (misma que se altera en
caso de desprendimiento de retina
o daño al nervio óptico).
Es necesario revisar la movilidad de
los ojos y la presencia o no de
visión doble, lo que podría explicarse
por daño en los músculos extraoculares. De igual manera, una asimetría entre el tamaño de las pupilas podría ser
manifestación de daño cerebral
importante.
Otro signo que debe ser evaluado es
la presión ocular que, de
encontrarse anormal, habrá que hallar
la causa y tratarla según el caso.
La exploración del ojo debe seguir un
orden determinado empezando por
los párpados y observando si hay
heridas superficiales o profundas, inflamación y dolor. La parte anterior del ojo se examina necesariamente con
la lámpara de hendidura, con la cual, se revisa la córnea (abrasiones, heridas, úlceras,
perforaciones, etc.), el iris
(ruptura por trauma), el lente cristalino que,
en caso de trauma, podría estar dislocado u opacificado.
También la órbita y su contenido
(grasa , músculos extraoculares, nervio óptico) pueden ser afectados por un accidente como una
fractura con o sin atrapamiento
del ojo, hundiéndolo, o al
contrario, protruyéndolo debido a sangrado dentro
de la cavidad. En este caso puede elevarse la
presión ocular que en pocas horas puede hacer perder
definitivamente la visión. Una medida urgente
es descomprimir la órbita por diferentes medios.
Los lentes de contacto pueden ser una
fuente importante de infección
que, de no tratarse a tiempo, puede repercutir en la pérdida de la visión por perforación secundaria, una úlcera
o absceso.
Otra causa frecuente de emergencia es
la presencia de cuerpos extraños en la córnea o por detrás de los párpados e inclusive dentro del
ojo.
En caso de trauma, la integridad del
ojo debe ser explorada con un
tomógrafo y, habiendo descartado
ruptura del mismo, con ultrasonido, eliminando
la presencia de un cuerpo extraño, un
sangrado o un desprendimiento de retina.
El glaucoma agudo es una causa
frecuente de pérdida de visión
acompañada de dolor , náusea y vómito. Aunque no se considera un accidente, sí
es una urgencia que en unas cuantas horas
puede llevar a la ceguera y que debe ser tratada
de inmediato.
En el caso de la retina, esta puede
sufrir de un desgarro que, de ser
detectado a tiempo, puede resolverse
con la aplicación de láser sin tener que
llegar al quirófano.
En resumen, aunque la mayoría de las
enfermedades oculares deben ser tratadas por el oftalmólogo, el médico general debe
conocer la anatomía y los
diferentes trastornos y consecuencias posibles que pueden ocurrirle a un paciente. Esto es un factor
preponderante para salvar el ojo
y, muchas veces, la vida e integridad del mismo.
El mejor accidente es el que se evita . O al
menos no complicar lo existente.
Quemaduras químicas . Se podrían
dividir en dos tipos principales:
Ácidos. Como regla general,
los ácidos pueden causar considerable enrojecimiento y ardor en los ojos, pero
normalmente se resuelven con relativa facilidad con un lavado de ojos bien
realizado
Alcalinos.
Sustancias o productos químicos que son básicos (álcalis) son mucho más graves,
pero pueden no parecer tan serias de principio porque no causan un dolor tan
inmediato con enrojecimiento como los ácidos. Algunos ejemplos de
sustancias alcalinas son limpiadores de horno, lejía, productos para
limpiar el inodoro y
hasta polvo de tiza.
Quemaduras térmicas
Es también
aconsejable acudir directamente al oftalmólogo después de realizar el lavado de ojos. Las quemaduras térmicas(colillas
de cigarrillos, fuego directo) en general son menos graves que las anteriores,
aunque deben ser lavadas (para eliminar las cenizas o cuerpos extraños) y
posteriormente acudir al especialista.
¿Cómo realizar un lavado de ojos con suero fisiológico o agua tibia?
Si el
paciente sufre una quemadura
química por álcali o ácido debes intentar lavar el ojo INMEDIATAMENTE con abundante suero fisiológico (o agua tibia sino tienes suero a
mano).
Esto
se puede hacer directamente poniendo los ojos sobre la fuente de agua (unos 15
minutos) o usando una jeringa (sin aguja) para aplicar el agua o el
suero directamente sobre la superficie
ocular.
Está demostrado que la gravedad de estas lesiones es
inversamente proporcional a la prontitud y extensión del lavado ocular; por lo que
su atención en la casa o lugar del accidente es primordial.
Debe
recordarse que después de lavar el ojo, un álcali fuerte puede seguir
penetrando y dañando estructuras del ojo hasta 48 horas después.
En todos los
casos requieren acudir después del lavado directamente al oftalmólogo de
urgencias
En casos de accidentes
graves (traumatismos
múltiples, accidentes de coche, etc…) en que exista gran hinchazón o
hematoma de los párpados y donde se tenga la duda de la indemnidad del globo
ocular es preferible no intentar abrirlo,
para evitar crear presión en el mismo produciendo un vaciado de los componentes
intraoculares en el intento.
Cuerpos extraños en los ojos
En los casos
de que te entre un cuerpo extraño en el ojo,
es mejor acudir al especialista para que valore y compruebe donde está situado. Arenas de playa, partículas metálicas que saltan cuando se usa la “Radial”
suelen ser muy frecuentes y molestos.
Una vez
localizado se puede tratar de sacar con un chorro de suero fisiológico y sino será el oftalmólogo el
encargado de retirar la partícula extraña después de poner una gota de
anestésico.
En algunos
casos es necesario evertir el párpado superior (dar la vuelta al párpado)
porque pueden localizarse cuerpos extraños ahí.
Una vez
retirado en función de si existe un daño sobre la córnea o no el
especialista dirá si es necesaria medicación o ocluir el ojo para evitar
el roce del párpado con la zona afectada.
Abrasiones o lesiones corneales no profundas
En los casos
en que se produzca un rasguño en un ojo y exista gran irritación, molestia con
la luz y lagrimeo constante es recomendable referir al oftalmólogo, ya que puede
producirse una úlcera e infectarse sino se trata a tiempo.
Algunas de
las causas de abrasiones en la córnea más frecuentes son ramas
de árboles, heridas o cortes
en el ojo por el
canto de una hoja de papel o folio, etc…
Siempre que haya un traumatismo en el ojo, primero, si no puedes
ayudar, no hagas nada ( algunas veces usar colirios sin prescripción médica es
mas dañino ); en segundo lugar, el lavado de los ojos con suero, agua…es
suficiente; y en tercer lugar, si hay problema de visión o no mejoras en 3-5
horas de las molestias, acude a tu oftalmólogo habitual. Los fines de semana no
es fácil encontrar uno…si lo necesitas, estamos localizados en el 690755268
(Estepona).
OFTALMÓLOGO ESTEPONA